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Ante las críticas y la polémica que se generó alrededor de una eventual reelección de Rosario Piedra Ibarra al frente de la CNDH, la presidenta Claudia Sheinbaum, evitó pronunciarse al respecto y justificó que es una decisión que compete solo al Senado.
No obstante, la titular del Ejecutivo reiteró su reconocimiento al trabajo de Piedra Ibarra y el legado de su familia en la defensa de las garantías individuales.
“Rosario Ibarra es, con su madre, digamos, su familia, un símbolo en México de lucha contra la represión, el autoritarismo, las desapariciones forzadas desde el Estado; y el Senado tomó la decisión de incluirla en la terna con otras dos mujeres, son tres mujeres, y ellos y ellas van a decidir, los senadores y senadoras, quién es el mejor perfil para ocupar la CNDH”, expresó.
La nominación de Rosario Piedra Ibarra generó inconformidad entre legisladores de la oposición, pues fue integrada a la terna pese a que fue la peor calificada, mientras que Nashieli Ramírez fue la mejor evaluada.
