El Ministerio de EnergÃa y Minas (Minem) de Cuba informó este domingo de la tercera caÃda total del Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Esto ocurre en menos de tres dÃas.
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âHace pocos minutos ocurrió otra desconexión del Sistema Eléctrico, SEN. De inmediato comenzó la labor de restablecimientoâ, escribió en Minem en redes sociales.
El primer apagón total del sistema, el primer evento de âcero cobertura energética nacionalâ, según el Minem, se produjo el viernes por la mañana. Esto ocurrió luego de que una salida âimprevistaâ de una central clave para el SEN desestabilizase todo el sistema.
Los avances de las primeras horas para reenergizar y recuperar el SEN volvieron a frustrarse el sábado por la mañana. Nuevamente se registró otro apagón total. A última hora de esa misma jornada colapsó el subsistema que se habÃa creado en la mitad occidental de la isla.
Para este momento se habÃan logrado hitos como la interconexión de circuitos desde Mariel (oeste) a HolguÃn (este). También se puso en marcha y se sincronizaron varias centrales termoeléctricas, entre ellas la Antonio Guiteras, una de las mayores del paÃs.
Desde el primer momento el Minem habÃa advertido que las tareas de recuperación del SEN iban a ser complejas y graduales.
El apagón pudiera terminar entre lunes y martes
El ministro de EnergÃa y Mina, Vicente de la O Levy, aseguró que el régimen aspira a que el SEN vuelva a alcanzar el martes el estado en que se encontraba el viernes antes de la primera incidencia masiva.
Agregó que la mayorÃa de los consumidores volverá a tener luz âmañana lunesâ y que âel último cliente quizás puede estar recibiendo (corriente) el próximo martesâ.
De la O Levy reconoció que la situación en el sistema eléctrico es âmuy tensaâ. Esta falta de electricidad dejó âa la mayorÃa de los cubanosâ sin agua en sus casas. Los motores que bombean el lÃquido hacia los hogares utilizan electricidad.
El SEN se encuentra en un estado muy precario por la escasez de combustible -fruto de la falta de divisas para importarlo. También presentan frecuentes averÃas en obsoletas centrales termoeléctricas, con cuatro décadas de explotación y carencia crónica de inversiones.
